Así será el Nuevo Gabinete de Milei

El triunfo resonante en las urnas ha encendido la mecha de una inevitable reconfiguración en las altas esferas del poder. El presidente Javier Milei, con la euforia de una victoria que redefine el mapa político, ya mira hacia el 10 de diciembre, fecha que no solo marca un cambio legislativo, sino la génesis de un Gabinete diseñado para el combate.
No es solo un recambio de nombres; es una estrategia de supervivencia legislativa. Milei lo ha confesado sin tapujos: “El Gabinete se va a construir a la luz del nuevo Congreso, de las alianzas que tengo que buscar para poder pasar la agenda”. La realpolitik se impone a la pureza ideológica. Las reformas que anhela el sello libertario necesitan el oxígeno de los consensos, y ese aire se respira negociando en los pasillos de un Congreso remozado.

El instrumento para esta nueva etapa, entonces, es el Gabinete. Un equipo de ministros que dejará de ser una cábala de la primera hora para convertirse en una herramienta de tracción política. La victoria en la Provincia de Buenos Aires, un hito inesperado, obliga a Milei a una “reconfiguración de la estructura política” para poder tejer las alianzas necesarias. El mensaje es claro: si no se entiende que el nuevo escenario exige una mano tendida a otros espacios, se está “no entendiendo nada” del arte de gobernar.
Entre Lealtades y Fugacidades
La inminente partida de figuras clave como Patricia Bullrich (Seguridad), Luis Petri (Defensa) y Manuel Adorni (Vocero Presidencial) -obligados a asumir sus bancas- abre fisuras que serán llenadas con pragmatismo. El Presidente, en un guiño a su mentor futbolístico, se declaró “bilardista”: sumará a “cualquiera que sirva a los efectos de conseguir los resultados”. La promesa electoral de 2023 es el contrato, y el fin (la reforma) justifica la incorporación de aliados de otras fuerzas.

En la danza de nombres que sobrevuela, la figura del jefe de Gabinete, Guillermo Francos, es un termómetro. Pese a los rumores, Milei lo defendió, dejando su futuro en un limbo estratégico: “Veremos a la luz del nuevo Gabinete cómo quedarán las cosas”. El Presidente buscó cortar de raíz las versiones de interna, calificando como una “falta de respeto” el intento periodístico de sacar a gente que ha “hecho mucho”.
El Corazón del Triángulo de Hierro
Milei también blindó a su círculo íntimo, el llamado “Triángulo de Hierro”: Santiago Caputo y su hermana, Karina Milei. “Ellos son los arquitectos de esto. Soy el divulgador, el que lleva las ideas, el que tiene la visión, pero al muñeco hay que hacerlo funcionar”. Un reconocimiento explícito al poder de la dupla, negando cualquier atisbo de tensión interna.

En este complejo tablero, el Presidente opta por el hermetismo respecto a los nombres que ya tiene en carpeta. La razón es un escudo de protección: “Dar esas definiciones implica que van a ir arruinarle la vida antes de asumir”. Una declaración que revela la alta presión y el escrutinio que enfrenta la gestión.
La conformación del nuevo Gabinete es, en esencia, la primera gran jugada estratégica post-electoral de Milei. Un gabinete forjado con la lógica del ajedrez, donde cada pieza debe estar colocada no por afinidad, sino por su capacidad de avance en el nuevo campo de batalla legislativo.
