La FIFA presentó en Miami a Maple, Zayu y Clutch, las mascotas oficiales del Mundial 2026, un torneo que se disputará del 11 de junio al 19 de julio de 2026 en Canadá, Estados Unidos y México. Estas figuras buscan reflejar la identidad cultural y deportiva de los países anfitriones en la primera Copa del Mundo con 48 selecciones.
Maple es un alce canadiense vestido de rojo que ocupa el rol de arquero. Representa la creatividad, resiliencia y autenticidad propias de Canadá.
Zayu, el jaguar mexicano, simboliza la agilidad, velocidad y dinamismo ofensivo, características que evocan la pasión con la que México vive el fútbol.
Clutch, el águila estadounidense, se desempeña como mediocampista e inspira a su equipo con energía, determinación y liderazgo, reflejando el espíritu competitivo de Estados Unidos.
El presidente de la FIFA, Gianni Infantino, destacó que estas mascotas transmiten alegría, emoción y unión. Además, confirmó que estarán presentes en camisetas, videojuegos, redes sociales y eventos oficiales, acompañando el camino hacia la Copa Mundial 2026.
El sorteo de grupos se celebrará el 5 de diciembre en Washington, con Argentina como actual campeón tras su consagración en el Mundial de Catar 2022. La expectativa mundial crece día a día, y las mascotas se suman como protagonistas de un torneo que promete ser histórico e inolvidable.
Más allá de lo deportivo, cada mascota busca convertirse en un puente cultural. Maple conecta con los bosques y paisajes infinitos de Canadá, Zayu con la fuerza mística de las selvas mexicanas y Clutch con el vuelo majestuoso sobre las vastas llanuras de Estados Unidos. No son simples caricaturas, sino símbolos que condensan identidades, memorias y sueños.
El Mundial 2026 no será únicamente un espectáculo futbolístico: será un relato global. En cada estadio, en cada pantalla y en cada corazón que siga el torneo, estas figuras recordarán que el fútbol no entiende de fronteras. En la pasión por la pelota, todos hablan el mismo idioma.
El espíritu de estas mascotas invita a pensar que cada pase, cada gol y cada abrazo en la tribuna formará parte de una celebración única. El fútbol se transforma en un lenguaje universal capaz de unir culturas, y el Mundial 2026 se prepara para escribir una nueva página en la historia del deporte.
