Alexis Stone, el artista drag británico, sorprendió a todos en la Semana de la Moda de Milán al aparecer caracterizado como la Mona Lisa durante un desfile de Boss. La intervención, concebida como una acción promocional, fusionó arte, moda y cultura pop, y se volvió viral en redes sociales, atrayendo la atención de medios y asistentes en uno de los eventos más influyentes del calendario internacional.
Elliot Joseph Rentz, nombre real de Stone, es conocido por sus transformaciones en personajes icónicos. Su influencia en plataformas como TikTok e Instagram, con 890.000 y 1,3 millones de seguidores respectivamente, lo ha consolidado como un referente del drag y la cultura pop. Stone combina maquillaje facial, prótesis y efectos especiales para lograr metamorfosis corporales completas, documentadas en videos que se viralizan y generan conversación digital sobre sus creaciones originales.
La aparición de Stone como la Mona Lisa se suma a otras intervenciones memorables: en 2022 encarnó a Mrs. Doubtfire de Robin Williams, luego a Morticia Addams (Anjelica Huston, 1991) y en junio de 2024 sorprendió como Miranda Priestly, el icónico personaje de Meryl Streep en El diablo viste de moda. Estas acciones estratégicas han permitido a las marcas de moda conectar con audiencias globales y generar un impacto emocional inmediato.
Stone describe sus colaboraciones como “vallas publicitarias en movimiento”, eligiendo personajes reconocidos por varias generaciones. Su arte de la transformación se convirtió en una herramienta para que las marcas se integren al imaginario colectivo, refuercen su relevancia cultural y aprovechen la potencia de las redes sociales. La colección de Boss, dirigida por Marco Falcioni, se inspira en el ‘sturm und drang’ alemán y apuesta por intervenciones audaces, demostrando cómo la fusión entre moda y performance drag redefine la visibilidad de las marcas y la experiencia del público.
La presencia de Alexis Stone confirma que la identidad drag y la transformación artística no solo impactan visualmente, sino que también funcionan como un puente entre arte, moda y cultura popular, consolidando su lugar como uno de los talentos más disruptivos y comentados de la moda internacional.
